El retorcido drama de acción de 2003 del escritor y director Park Chan-wook Oldboy ganó muchos premios en el circuito de festivales, incluida la Palma de Oro en el Festival de Cine de Cannes. En medio de la trama laberíntica e impredecible, hay una escena de amor que se vuelve inquietante en retrospectiva después de que se aclaran todos los misterios.
Oh Dae-su (Choi Min-sik) es arrestado una noche por embriaguez pública y se pierde la fiesta de cumpleaños de su hija pequeña. Después de que un amigo lo recoge en una comisaría, es secuestrado y aislado en una habitación de hotel durante 15 años. Cuando finalmente es liberado, entra en un restaurante de sushi y entabla una relación con su joven chef, Mi-do (Kang Hye-jung). Intenta recomponer su vida, pero deja de buscar a su hija cuando se entera de que ha sido adoptada por una pareja sueca.
Pronto, su captor, Lee Woo-jin, contacta a Dae-su con un ultimátum: si adivina el motivo de su encarcelamiento en cinco días, Woo-jin se suicidará; de lo contrario, matará a Mi-do. La relación de Dae-su y Mi-do se vuelve cada vez más íntima, pero Dae-su entiende todo. Fue a la escuela secundaria con Woo-jin y vio al chico participar en incesto con su hermana. Dae-su difundió la noticia y descubre que la hermana estaba tan mortificada que se suicidó. Parece que Woo-jin se vengó de Dae-su, encarcelándolo… y obligándolo al incesto. ¿Recuerdas a su hija perdida hace mucho tiempo? Es Mid-do.