Líneas improvisadas que cambiaron los roles para siempre


Si bien Harrison Ford ya tenía 39 años cuando debutó como Indiana Jones en En busca del arca perdida, los héroes de acción envejecidos eran comunes en ese momento, gracias a James Bond, Harry el Sucio y John Shaft. Sin embargo, la mayoría tendía a no decir directamente que no eran pollos de primavera y ciertamente no estaban ansiosos por burlarse de sí mismos por ello.

Este aspecto de Indiana Jones es una de las muchas cosas que lo hicieron tan único y entrañable. Resulta que una improvisación de Harrison Ford jugó un papel importante en el establecimiento de ese aspecto del personaje. En la escena en la que Marion (Karen Allen) ayuda a Indy a lamerse las heridas, Indy se estremece y hace una mueca ante sus diversos dolores y molestias, lo que la lleva a darse cuenta de que no es el mismo hombre que conoció diez años antes. En respuesta, vado improvisado la línea ahora icónica, “no son los años, cariño, es el kilometraje”.

Terminó siendo el primero de muchos casos en los que Indy se menospreciaba a sí mismo por su edad, y también inspiraría rasgos similares en héroes de acción mayores como John McClane (“Die Hard”) y Roger Murtaugh (“Lethal Weapon”).

Contenido original en Inglés


Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *