Ahora que hemos identificado los ingredientes que usará en su creación de guacamole, es hora de analizar el orden correcto en el que debe agregarlos. Al igual que cuando horneas un pastel, el orden en que se juntan los ingredientes es muy importante. Esta no es una receta de un tazón para todos, así que tranquilice a sus caballos.
Comience por machacar su aguacate. Un mortero funciona mejor y es la herramienta tradicional utilizada para hacer guacamole, pero a veces es más fácil agarrar un tenedor de confianza y dar por terminado el día. Cualquiera que sea la herramienta que tengas, úsala para romper los trozos más grandes de aguacate. Si tienes un tenedor, clava la parte posterior plana de los dientes en la pulpa del aguacate hasta que se pulverice.
Luego usa el tenedor para batir el aguacate hasta que esté cremoso y suave. Si prefiere dejar algunos trozos en la mezcla, mezcle todo menos hasta que alcance la consistencia deseada. A continuación, agregue el jugo de lima y las especias, y déle otra mezcla sólida. Finalmente, agregue suavemente todos los demás ingredientes, como la cebolla, el tomate y el cilantro. Evite magullar las verduras y las hierbas mezclándolas lentamente hasta que se combinen.