Las decisiones de Finlandia y Suecia de unirse a la alianza militar occidental amenazan con aumentar los riesgos de confrontación armada, según un funcionario ruso.
Si bien Rusia no ve la decisión de Finlandia y Suecia de unirse a la OTAN como una amenaza, el despliegue de infraestructura militar allí podría desencadenar una respuesta de Moscú, advirtió el lunes el presidente Vladimir Putin.
La membresía de las naciones nórdicas en la OTAN “no representa una amenaza directa para nosotros… pero la expansión de la infraestructura militar en estos territorios ciertamente provocará nuestra respuesta”, dijo Putin en la transmisión de la cumbre de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva, un ejército dirigido por Moscú. Alianza.
Un funcionario ruso también advirtió a Occidente que no “simplificaría” la expansión de la OTAN cerca de sus fronteras.
Moscú ha citado repetidamente la expansión postsoviética de la coalición militar liderada por Estados Unidos hacia el este, hacia territorio ruso, como la razón de su invasión de Ucrania.
“No deberían hacerse ilusiones de que vamos a tolerarlo”, dijo el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, citado por la agencia de noticias rusa RIA.
Ryabkov, quien encabezó las conversaciones con Estados Unidos sobre una propuesta rusa fallida para detener la expansión de la OTAN hacia el este, dijo que las decisiones de Helsinki y Estocolmo de unirse al pacto fueron un error.
“El nivel general de tensión militar aumentará, la previsibilidad en esta área disminuirá. Es una pena que el sentido común se sacrifique por una disposición fantasma de lo que se debe hacer en esta situación en desarrollo”, dijo Ryabkov.
Rusia dio pocas pistas sobre lo que haría en respuesta a la ampliación de la OTAN al norte, diciendo simplemente que habría una “respuesta militar-técnica”.
Uno de los aliados más cercanos de Putin dijo el mes pasado que Rusia podría desplegar armas nucleares y misiles hipersónicos en el enclave ruso de Kaliningrado si Finlandia y Suecia se unen a la OTAN.
En una conversación telefónica el domingo con el presidente finlandés, Sauli Niinisto, el presidente ruso, Vladimir Putin, insistió en que Moscú “no representaba una amenaza para la seguridad de Finlandia”. Los dos países comparten una frontera de 1.300 km (800 millas).
Finlandia, que ha sido neutral durante décadas, planea postularse pronto para unirse a la OTAN, que actualmente tiene 30 miembros.
Mientras tanto, el gobernante Partido Socialdemócrata de Suecia ha dicho que también quiere unirse tras la invasión rusa de Ucrania, un movimiento histórico que pondría fin a la política de no alineación de los dos países durante décadas.
Turquía, miembro de la OTAN, ha expresado su preocupación por la incorporación de los dos países nórdicos a la alianza liderada por EE. venta de determinadas armas a Turquía.
La OTAN y Estados Unidos dijeron que confiaban en que los dos países serían aceptados en la alianza y que las reservas de Turquía podrían superarse.