Cinco personas resultaron heridas después de que dos cohetes impactaran en un depósito de combustible y dos más luego impactaran en una fábrica militar en la ciudad occidental.
Varios cohetes rusos alcanzaron la ciudad de Lviv, en el oeste de Ucrania, que ha sido un refugio para las personas desplazadas desde que comenzó la invasión rusa el 24 de febrero.
El gobernador Maksym Kozytsky dijo que dos cohetes impactaron en un depósito de combustible en las afueras del este de la ciudad a media tarde del sábado, hiriendo a cinco personas, y dos cohetes impactaron luego en una fábrica militar.
Dijo que había visitado el lugar de los primeros ataques y que la situación estaba “bajo control”, pero pidió a los residentes que se refugiaran.
El alcalde Andriy Sadoviy dijo que otro ataque aéreo causó “daños significativos” a la infraestructura.
“Los edificios residenciales no sufrieron daños”, escribió en Twitter sin compartir los detalles de la ubicación.
⚡️⚡️ Como resultado de nuevos ataques con misiles en Lviv, se causaron daños significativos a la infraestructura. Los edificios residenciales no sufrieron daños.
Los incendios siguen apagándose.
Los servicios correspondientes están trabajando sobre el terreno.
— Andriy Sadovy (@AndriySadovyi) 26 de marzo de 2022
Lviv, a unos 60 kilómetros (37 millas) de la frontera polaca, había escapado hasta ahora de los bombardeos y combates que han devastado algunas ciudades ucranianas más cercanas a Rusia.
La ciudad tenía una población de alrededor de 717.000 habitantes antes de la guerra, pero se ha convertido en un refugio para miles de familias que huyen de lo peor de los combates en el este, sur y centro de Ucrania y un centro para las personas que huyen del país.
A pesar de más de cuatro semanas de lucha, hasta ahora Rusia no ha logrado capturar ninguna ciudad ucraniana importante. El conflicto ha matado a miles, ha enviado a casi 3,8 millones de personas al extranjero y ha expulsado a más de la mitad de los niños ucranianos de sus hogares, según Naciones Unidas.
Moscú señaló el viernes que estaba reduciendo sus ambiciones militares para centrarse en el territorio reclamado por los separatistas respaldados por Rusia en el este, antes de atacar las afueras de Lviv el sábado.
Los ataques en Lviv tuvieron lugar mientras el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, visitaba Polonia.
Biden describió al presidente ruso Vladimir Putin como un “carnicero” en su primera reunión cara a cara con altos funcionarios ucranianos desde que comenzó la guerra.
La reunión, celebrada en Varsovia, la capital polaca, fue la última escala de Biden en un viaje a Europa destinado a subrayar su oposición a la invasión rusa, su solidaridad con Ucrania y su determinación de trabajar juntos en estrecha colaboración con los aliados occidentales para hacer frente a la crisis. .
La OTAN ha descartado hasta ahora una zona de exclusión aérea sobre Ucrania solicitada por el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, por temor a que pueda conducir a enfrentamientos directos con las fuerzas rusas y una escalada a escala europea.