Alemania ha tratado de reducir su dependencia energética de Rusia desde que Moscú invadió Ucrania.
Alemania y Qatar han entrado en una asociación energética a largo plazo, dijo un funcionario alemán, ya que la economía más grande de Europa busca volverse menos dependiente de las fuentes de energía rusas.
Rusia es el mayor proveedor de gas de Alemania y el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, ha lanzado varias iniciativas para reducir la dependencia energética de Alemania de Rusia desde que invadió a su vecina Ucrania.
El emir de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, se reunió con Habeck el domingo y los dos hombres discutieron formas de fortalecer las relaciones bilaterales, particularmente en el sector energético, dijo la corte emiratí en un comunicado.
Un portavoz del Ministerio de Economía alemán en Berlín confirmó el domingo que se había llegado a un acuerdo.
“Las empresas que vinieron a Qatar con (Habeck) ahora comenzarán las negociaciones del contrato con la parte qatarí”, dijo el portavoz.
En un comunicado, Qatar dijo que había buscado durante años abastecer a Alemania, pero que las conversaciones nunca habían conducido a acuerdos concretos.
Qatar dijo que estuvo de acuerdo con Alemania en que “sus respectivas entidades comerciales reanudan y avanzan en las discusiones sobre suministros de GNL a largo plazo”.
Habeck también se reunió con el Ministro de Estado de Asuntos Energéticos de Qatar, Saad Sherida al-Kaabi, en Doha, donde discutieron las relaciones energéticas y la cooperación entre Qatar, uno de los principales exportadores de gas natural del mundo, y Alemania, y las formas de mejorarlas, según a una declaración. de al-Kaabi.
A fines de febrero, el canciller alemán, Olaf Scholz, anunció la construcción de dos nuevas terminales para gas natural licuado en respuesta a lo que algunos críticos han calificado como una excesiva dependencia de Alemania del gas ruso. Las terminales estarán ubicadas en Brunsbuttel y Wilhelmshaven en el norte de Alemania.
Tras la invasión rusa de Ucrania, Alemania suspendió el proyecto de gasoducto Nord Stream 2 para entregar gas natural ruso directamente a Alemania a través del Mar Báltico.
Alemania tiene la intención de eliminar gradualmente su generación de energía nuclear para fines de este año, lo que deja a los observadores preguntándose cómo la economía más grande de Europa satisfará todas sus necesidades energéticas.