Los legisladores estadounidenses han presentado un proyecto de ley bipartidista que prohibiría las importaciones de productos derivados del petróleo, gas natural licuado y carbón de Rusia tras su ataque a Ucrania. La Casa Blanca, sin embargo, se opone a tal prohibición, citando preocupaciones sobre problemas de suministro y aumentos de precios en la bomba de gasolina. Alemania y otros países europeos continúan importando grandes cantidades de gas natural de Rusia, a pesar de las sanciones de la UE. La semana pasada, el gigante energético alemán E.ON dijo que no tenía planes de detener el flujo de gas del gasoducto Nord Stream 1.
Los legisladores proponen que EE. UU. prohíba las importaciones de combustibles fósiles rusos
