El cáncer de riñón es uno de los tipos de cáncer menos comunes que pueden afectar a los gatos. Casi todos los tipos de cáncer son más comunes en los gatos mayores, pero el linfoma renal también puede afectar a los gatos más jóvenes, especialmente si están infectados con el virus de la leucemia felina (FeLV). Desafortunadamente, el cáncer de riñón en los gatos es muy grave y el pronóstico suele ser malo, incluso con tratamiento.
En este artículo, exploraremos los diferentes tipos de cáncer de riñón en gatos, los síntomas más comunes y cómo se diagnostica y trata.
¿Qué es el cáncer de riñón?
Los riñones de tu gato son dos órganos con forma de frijol que descansan a ambos lados de la columna, justo debajo de la caja torácica. Los riñones están involucrados en el manejo del equilibrio de agua en el cuerpo, eliminando los desechos y manteniendo el equilibrio adecuado de sales y minerales. También juegan un papel importante en la producción de glóbulos rojos, el control de la presión arterial y el mantenimiento de la salud y la fortaleza de los huesos de su gato.
El cáncer de riñón, también llamado cáncer de riñón, se produce cuando las células sanas de los riñones de tu gato crecen sin control y se vuelven anormales. Puede comenzar en los riñones (llamado cáncer de riñón primario) o puede comenzar en otra área del cuerpo y diseminarse a los riñones (llamado cáncer de riñón secundario).
¿Cuáles son los diferentes tipos de cáncer de riñón en gatos?
Desafortunadamente, la mayoría de los tipos de tumores que se encuentran en los riñones de los gatos son malignos (cancerosos). El tipo más común de cáncer de riñón en gatos es el linfoma renal, seguido del carcinoma de células renales y el nefroblastoma.
Es más común que el cáncer de riñón en los gatos sea secundario, lo que significa que se ha diseminado a partir de un cáncer que comenzó en otras partes del cuerpo. Sin embargo, el cáncer primario también puede ocurrir.
Debido a que los riñones tienen un suministro de sangre tan bueno, el cáncer de riñón tiende a diseminarse (hacer metástasis) rápidamente a otras partes del cuerpo, razón por la cual el pronóstico del cáncer de riñón en gatos es generalmente malo.
¿Cuáles son los síntomas del cáncer de riñón en gatos?
Al diagnosticar el cáncer de riñón, su veterinario puede examinar una muestra de orina de su gato (análisis de orina).
Los síntomas del cáncer de riñón pueden ser bastante inespecíficos e incluyen:
- Pérdida de peso
- Letargo
- Reducción del apetito
- Náuseas o vómitos
- Dolor abdominal
- Vientre agrandado
- Masa palpable en el abdomen
- Sangre en la orina
- Encías pálidas
También puede ver signos de insuficiencia renal, como beber más y orinar más, pero esto es más a menudo un signo de enfermedad renal crónica que de cáncer de riñón.
¿Qué causa el cáncer de riñón en los gatos?
Vejez
Al igual que en los humanos, el riesgo de la mayoría de los tipos de cáncer aumenta con la edad. De hecho, con el tiempo, las células de nuestro cuerpo se dañan. Cuanto más envejecemos, más se acumula este daño y más probable es que las células se vuelvan cancerosas. Por lo tanto, es más probable que el cáncer de riñón afecte a los gatos mayores.
Virus de la leucemia felina y linfoma renal
El tipo más común de cáncer de riñón en gatos es el linfoma renal. El linfoma es un tipo de cáncer que afecta los glóbulos blancos de su gato y puede afectar muchas partes diferentes del cuerpo. Este tipo de cáncer está asociado con el virus de la leucemia felina (FeLV), que es más común en gatos de mediana edad. De hecho, aproximadamente el 50 % de los gatos diagnosticados con linfoma renal dan positivo para FeLV.
La buena noticia es que a medida que se vacunan más gatos contra FeLV, este tipo de cáncer se vuelve menos común. Aunque en la actualidad, los linfomas siguen representando el 30% de todos los cánceres diagnosticados en gatos.
¿Cómo diagnosticar el cáncer de riñón en gatos?
Algunos gatos con cáncer de riñón beben y orinan más, aunque esto también puede ser un signo de enfermedad renal.
Su veterinario tomará un historial completo y realizará un examen físico, que incluye sentir el tamaño y la forma de los riñones de su gato.
Se pueden realizar análisis de sangre en esta etapa, especialmente para evaluar los valores renales de su gato, el recuento de glóbulos rojos (para detectar anemia) y electrolitos como el potasio. Estas pruebas le darán a su veterinario una indicación de qué tan bien están funcionando los riñones de su gato, así como una idea de su salud general.
Su veterinario también puede examinar una muestra de orina de su gato (análisis de orina). Es común con los tumores renales ver proteína o sangre en la orina.
Si se detectan anomalías, el siguiente paso suele ser realizar imágenes abdominales para observar más de cerca los riñones de su gato mediante rayos X o ultrasonido. Una ecografía abdominal le permitirá a su veterinario verificar el tamaño y la apariencia de los riñones, así como también revisar otros órganos, como los ganglios linfáticos locales, en busca de signos de propagación. En algunos casos, se pueden recomendar imágenes avanzadas, como CT o MRI, especialmente para la estadificación completa del cáncer.
Para un diagnóstico definitivo de cáncer de riñón, su veterinario deberá obtener una muestra del riñón de su gato. A veces, una muestra muy pequeña tomada con una aguja (llamada aspiración con aguja fina) mientras su gato está bajo anestesia general es suficiente para hacer un diagnóstico. Sin embargo, algunas masas pueden requerir una biopsia más grande guiada por ultrasonido o por cirugía.
¿Cómo se trata el cáncer de riñón en gatos?
El tratamiento para el cáncer de riñón en gatos depende del tipo de cáncer y de si hay cáncer en otras partes del cuerpo.
El linfoma renal es el tipo más común de cáncer de riñón en los gatos. El linfoma renal se trata con quimioterapia.
En otros tipos de cáncer de riñón, se puede recomendar una cirugía para extirpar el riñón afectado (llamada nefrectomía). Esto solo es posible en gatos donde solo un riñón está afectado y no hay evidencia de que el cáncer se propague a otras partes del cuerpo. Se puede recomendar quimioterapia o radioterapia en combinación con cirugía para mejorar el pronóstico.
Para algunos gatos, la quimioterapia o la cirugía no son la opción correcta, y el tratamiento tendrá como objetivo mantenerlos lo más cómodos posible durante el tiempo que les queda. El tratamiento paliativo puede incluir medicamentos como esteroides, medicamentos contra las náuseas, estimulantes del apetito, analgésicos y antibióticos para infecciones secundarias.
¿Cuál es el pronóstico para los gatos con cáncer de riñón?
Desafortunadamente, el cáncer de riñón en gatos generalmente tiene un mal pronóstico. Esto se debe a que el cáncer de riñón tiende a diseminarse rápidamente a otras partes del cuerpo, lo que dificulta el tratamiento.
El tiempo de supervivencia promedio para los gatos con linfoma renal es de uno a tres meses para los gatos que solo reciben corticosteroides y cuidados paliativos, o de seis a nueve meses para los que reciben quimioterapia. Sin embargo, estos son tiempos de supervivencia promedio y algunos gatos viven mucho más tiempo.
En los gatos cuyo cáncer afecta solo a un riñón y no se ha propagado a ningún otro lugar, la extirpación quirúrgica de ese riñón puede ser 100 % curativa. Este tipo de cirugía es muy invasiva y tiene muchos riesgos, pero estos gatos pueden recuperarse por completo.
Para muchos gatos, las opciones de tratamiento intensivo, como la quimioterapia o la cirugía, pueden no ser la elección correcta. Sin estos tratamientos, los tiempos de supervivencia suelen ser cortos. Sin embargo, su equipo veterinario puede ayudarlo a mantener a su gato feliz y cómodo con los cuidados paliativos en el hogar.
Desafortunadamente, el cáncer de riñón en los gatos es muy grave e incluso con un tratamiento intensivo, el pronóstico suele ser malo. Tu equipo veterinario está ahí para ayudarte a monitorear y evaluar la calidad de vida de tu gato. Desafortunadamente, una vez que la calidad de vida ya no es buena, la eutanasia puede ser la opción más suave.
Ver fuentes
Williams AG, Hohenhaus AE, Lamb KE. Incidencia y tratamiento del linfoma renal felino: 27 casos. J Felino Med Surg. 2021 de octubre; 23 (10): 936-944. doi: 10.1177/1098612X20984363. Publicado en línea el 19 de enero de 2021. PMID: 33464143.