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Se sabe que los gatos son exigentes con los peluqueros. Sus patas esponjosas, lenguas rosadas y posturas relajadas hacen de la hora del baño un lujoso día de spa para ellos. Pero esta rutina es verdaderamente vital para su bienestar. El aseo regular ayuda a mantener la salud general de su gato y, a veces, necesita su ayuda.
Comprender el pelaje de su gato es el primer paso para un aseo eficaz. Generalmente se compone de tres tipos de pelo: guardia, arista y plumón. La muda es un proceso natural a principios de primavera y otoño, pero la muda, que es la muda de la capa interna, puede ocurrir durante todo el año.
En este artículo aprenderás por qué y cómo cepillar a un gato de forma cooperativa y mantenerlo libre de enredos durante años.
¿Por qué mi gato necesita un cepillado regular?
El cepillado regular puede ayudar a evitar que su gato ingiera pelo suelto, reducir la formación de bolas de pelo y minimizar los vómitos mientras mantiene su pelaje sano y brillante. También mejora el tono muscular, estimula la circulación sanguínea y ayuda a regular la temperatura corporal en climas cálidos. Cepillar gatos con pelaje largo o grueso evita que el pelo se enrede y elimina la suciedad.
El cepillado es fundamental para prevenir enredos y nudos en el pelo de gatos mayores, enfermos o con problemas en las articulaciones que pueden tener dificultades para acicalar determinadas partes del cuerpo. El peinado mantiene su pelaje en buen estado y estimula la liberación de endorfinas y otros mediadores, proporcionando un efecto terapéutico. Esto puede relajar a un gato artrítico y ayudarlo a afrontar mejor el dolor.
El cepillado no es sólo una rutina de aseo; Es una gran experiencia de unión. Este es un momento para que usted y su gato se conecten, fortalezcan su relación y brinden una interacción positiva para ambos.
Cepilla a tu gato al menos una o dos veces por semana para evitar que se enrede y reducir la descamación. Los gatos de pelo largo necesitan un cepillado diario frecuente para evitar enredos y nudos. El cepillado no sólo ayuda a mantener sano el pelaje de tu gato, sino que también reduce la cantidad de pelo suelto en tu hogar.
¿Cuándo debo empezar a cepillar a mi gato?
Lo mejor es empezar cuando tu gatito se une a la familia por primera vez o cuando es joven. Para los gatitos o gatos adolescentes que no están acostumbrados a acicalarse, me gusta comenzar con suaves caricias en la cabeza y la cara para que se acostumbren al contacto humano.
Luego les facilito el aseo usando un cepillo de dientes suave y limpio (similar a la lengua materna) mientras comen o lo combino con golosinas. Una vez que se sienten cómodos con esto, introduzco gradualmente un cepillo para que se acostumbren a la sensación del cepillado.
El mejor equipo de aseo.
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Obtenga las herramientas de aseo adaptadas al pelaje y las necesidades únicas de su gato. Deberá considerar la longitud y el grosor del pelaje de su gato, su tolerancia al cepillado y cualquier problema de salud, como problemas de piel y articulaciones. Pruebe diferentes herramientas hasta que encuentre la combinación perfecta que haga el trabajo y mantenga a su gato relajado. Aquí hay algunas ideas para comenzar:
gatos de pelo corto
- Peine para pulgas
- Cepillo suave y terso para gatos jóvenes, artríticos o mayores
- ZoomNovio
- Guantes de goma para gatos a los que no les gusta acicalarse
Gatos con pelo largo o grueso
- Peine de dientes anchos o peine de doble cara
- Peine antipulgas de dientes largos
- Cepillo de dientes para cerdas densas
- Pincel
- Sello de goma
- Equipo desenredante
Incluya golosinas y juguetes en su caja de herramientas de cuidado personal.
Seis pasos para un pelaje sano
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El aseo puede ser una experiencia agradable para algunos gatos, mientras que para otros puede resultar emocionante o demasiado estimulante. Puede que a los gatos seleccionados no les guste, especialmente si han tenido un encuentro negativo.
Estos son los pasos esenciales para cepillar a un gato mediante un entrenamiento y una desensibilización basados en recompensas.
1. Empieza cuando tu gato esté tranquilo
Los gatos generalmente se acicalan cuando se sienten relajados. Introduce lentamente el cepillado a tu gato cuando esté feliz y tranquilo. Acércate a tu gato y observa su lenguaje corporal para determinar si está estresado, vacilante o relajado. Acaricia suavemente a tu gato con la mano sobre las áreas que deseas acicalar para ver si está de humor para que lo cepillen.
2. Introducir herramientas de aseo
Coloca el cepillo o peine en el suelo y deja que tu gato explore y huela la herramienta de aseo. En este punto, puedes ofrecerle una golosina a tu gato. Luego, toma el cepillo y deja que lo explore en tu mano, permitiéndole frotar su cabeza o mejilla contra la herramienta de aseo.
Si su gato está asustado, nervioso o reacio a que lo cepillen, comience levantando el cepillo/peine y acariciándolo con la mano mientras lo sostiene sin llegar a acicalarlo. Una vez que su gato esté relajado (tal vez al día siguiente), comience a cepillarle la cabeza y a arreglarlo después de cada cepillado.
También puedes intentar alimentar a tu gato con pasta cremosa de Churu mientras lo acaricias con el peine, como solución a corto plazo. Esto ayudará a tu gato a aprender a asociar el cepillado con una recompensa, haciendo del aseo una experiencia más positiva.
3. Empieza con un gato sin colchoneta.
Asegúrate de que tu gato no tenga una estera. Cepillar el pelo enmarañado y enmarañado puede resultar muy doloroso para tu gato. Tu rutina diaria de aseo debe evitar los enredos, pero si tu gato de pelo medio o largo los tiene, o si has adoptado un gato con enredos severos, lo mejor es buscar ayuda de un peluquero profesional o de tu veterinario.
Las esteras suelen aparecer debajo de las patas delanteras, debajo de la barbilla y alrededor de las traseras, incluidas las traseras. No se recomienda quitar las esteras ni afeitar a su gato usted mismo. Nunca uses tijeras para cortar tapetes, ya que puedes dañar la piel de tu gato.
4. Compruebe si hay plagas
Revise la piel de su gato en busca de pulgas, piojos o garrapatas con un peine antipulgas. Los excrementos de pulgas son una pequeña mugre negra que parece pimienta clara y se vuelve roja cuando se expone al agua. Los piojos se pueden detectar cuando separas el pelaje en busca de huevos o movimientos de piojos en la piel. Las garrapatas suelen ser más grandes que una pulga y parecen un bulto o un área hinchada. Las garrapatas tienen forma ovalada y tendrán un abdomen agrandado una vez lleno de sangre.
Consulte a su veterinario para el tratamiento y la prevención de parásitos adecuados si encuentra sanguijuelas.
5. Comienza con los puntos fáciles.
Comience por preparar a su gato donde le gusta que lo acaricien, como las mejillas y la parte superior de la coronilla. Luego, pasa a zonas menos indulgentes como el pecho, la espalda y las piernas. Trabaja con ciertos animales y da golosinas si se ponen un poco nerviosos.
No intentes tratar todo el cuerpo a la vez. Es mucho más probable que se toleren muchas sesiones cortas que una sesión larga. Mueve el cepillo o peine en la misma dirección que el pelaje y minimiza la manipulación de tu gato mientras lo cepillas, a menos que necesites llegar a una zona vulnerable, como el vientre.
6. Esté atento a los signos de irritación
Deje de acicalarlo inmediatamente si su gato se siente incómodo o muestra signos de angustia. Los indicadores incluyen aplanamiento de las orejas, tensión, espasmos de la piel, lamido de los labios, gruñidos o movimientos de la cola. Solo continúa cuando tu gato esté tranquilo y trata de establecer metas más pequeñas de las que tu gato puede tolerar.
Nunca impidas que tu gato huya hacia un lugar seguro, ya que esto solo dañará tu relación con él. Si no están listos hoy, puedes volver a intentarlo mañana. Termine siempre la sesión de aseo de manera positiva recompensando a su gato con golosinas y elogios.
Preguntas frecuentes
¿Cómo cepillar a un gato reacio?
Cuando cepilles a un gato reacio, sé paciente y gentil. Deja que el gato huela el cepillo, acarícialo con la mano y utiliza un cepillo de cerdas suaves. Mantenga las sesiones de cepillado breves (no más de unos pocos minutos) y ofrézcale golosinas como refuerzo positivo. Si el gato todavía tiene miedo o está estresado, pruebe con un cepillo de dientes humano o un guante de goma.
¿Cepillar a un gato es bueno para ellos?
Cepillar a un gato es algo muy bueno porque sirve para varios propósitos, el más importante de los cuales es mantener una piel sana. Quitar el pelo suelto ayuda a mantener el pelaje libre de enredos y caspa. El aseo también es esencial para minimizar las infestaciones de parásitos externos.
¿Los gatos se sienten mejor después del cepillado?
Cepillar a su gato no solo ayuda a mantener su pelaje en óptimas condiciones, sino que también es una excelente manera de reducir la muda, evitar que se enrede y brindar una experiencia de masaje relajante, especialmente útil para los felinos ansiosos.
Además, la electricidad estática puede acumularse en el pelaje del gato, por lo que el cepillado desactiva la carga y el voltaje. ¡Así que no olvides prestarle más atención a tu gato con una buena sesión de cepillado hoy!